LO ULTIMO ►

Fallo judicial. Cuáles son los medicamentos de venta libre que ya no se podrán vender fuera de las farmacias

Desde la Cámara Contencioso Administrativo Federal se decidió darle lugar a la medida cautelar que fue solicitada por dos cámaras farmacéuticas y eliminar los efectos de distintos artículos comprendidos en el DNU 70/2023, como el que permitía la venta de medicamentos de venta libre fuera de las farmacias. Los medicamentos de venta libre que ya no se podrán comprar por fuera de la farmacia serán los analgésicos y los antiácidos. Según un comunicado de la COFA (Confederación Farmacéutica Argentina) y la Fefara (Federación Farmacéutica de la República Argentina), “l a sentencia reconoce que la actividad farmacéutica no puede reducirse a una lógica comercial, y reafirma, en línea con el precedente “Farmacity” de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que el expendio de medicamentos es una función sanitaria indelegable que requiere la presencia, control e independencia profesional del farmacéutico “. Qué artículos del DNU 70/2023 se suspenden El fallo suspendió los artículos 313, 314, 3...

La crisis y el changuito: qué dejó de comprar el consumidor para cuidar el bolsillo

La crisis y el changuito: qué dejó de comprar el consumidor para cuidar el bolsillo

Solo en los últimos tres meses, el bolsillo tuvo que soportar un aumento general de los precios de 15%. Esa aceleración golpeó en los últimos meses la capacidad de compra de los salarios y obligó, en algunos casos, a que el consumidor tenga que priorizar algunos gastos sobre otros. De esa forma, los datos oficiales ya muestran una caída de entre 15 y 16% en productos lácteos, frutas y verduras en supermercados.

El declive en el consumo es una tendencia que comenzó tímidamente en abril y se fue profundizando como tendencia a medida que se acentuó la crisis cambiaria en los meses siguientes. Lo que sucedió fue que la aceleración de la inflación, combinada con salarios que no se actualizaron en la misma medida y un incremento de tarifas de servicios públicos terminaron por restringir la posibilidad de consumo.

Sin ir más lejos, lo primero que notan los analistas privados es que en el último tiempo primó el consumo con una mirada de corto plazo. "Estamos viendo una restricción de gasto con tarjeta de crédito porque cayó el consumo con el plan Ahora 6 y Ahora 12, por lo que la gente se limita en comprar 1 o hasta 3 cuotas, o bien efectivo y débito. Hay una visión más cortoplacista", indicó el director de la consultora Focus Market, Damián Di Pace.

Los datos del Indec, publicado este jueves, muestran que hay determinados rubros que en los supermercados tuvieron un caída significativa. La venta de alimentos preparados y rotisería, por ejemplo, avanzó en un año un 21%, es decir que perdió unos 24 puntos contra la evolución de la inflación en ese mismo mes.

Es el rubro con peor performance, pero a otros de consumo más básico también les fue mal. Es el caso de los lácteos, cuya facturación avanzó un 28%, es decir que perdieron un 16 por ciento contra la suba general de precios. Las ventas de frutas y verduras, también, retrocedieron un 15 por ciento en los supermercados.

Para Juan Manuel Primbas, director de Kantar Worldpanel, este dato podría ser interpretado no solo como una retracción de consumo sino como una elección de un "canal" distinto. "Lo que marca es un consumo menor en supermercados, pero quizás se mantenga más estable en otros canales, puede haber un cambio de canal del consumidor, por ejemplo a volver a comprar en verdulerías. Puede ser entonces un síntoma de una alternativa más económica a lo empaquetado".

Uno de los rubros que se mantiene a flote es el consumo de carne. Juan Vasco Martínez, director de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) explicó: "El consumo de carne estuvo estable, ya que durante muchos meses los precios avanzaron por debajo de la inflación. Esto se explica fundamentalmente porque se recompuso el stock ganadero y porque se ordenó el mercado que estaba distorsionado".

Más allá de los rubros alimenticios, el retroceso del poder adquisitivo del salario derrumbó el consumo de otros dos rubros en las grandes superficies comerciales: indumentaria y electrónica. En el primer caso, por ejemplo, la facturación cayó 29% en octubre en la comparación con la inflación interanual del mismo mes.

La venta de artículos electrónicos, por su parte, es el que sintió más notablemente el impacto de la devaluación. El consumo de este tipo se desplomó a ritmo de 40%. En otro informe del Indec difundido el jueves, sobre las ventas en los shoppings mostró un panorama aún peor: se vendieron un 64% menos de electrónicos, electrodomésticos y computadoras que el año pasado.

La expectativa sobre los próximos meses, desde el punto de vista de los compradores, no es el más optimista. El índice de confianza de los consumidores, que realiza la Universidad Torcuato Di Tella y que mide el nivel de certidumbre hacia el presente y futuro, repuntó levemente en diciembre. Pero el dato con el que termina el año no es más alentador: está en sus valores más bajos desde la crisis económica de 2001.


Comentarios